Un club, el nexo directo entre sus socios, vinos de autor de alta calidad y el enólogo. Deleitar las papilas gustativas con pequeñas partidas es el objetivo, mientras los oídos se alimentan con música en vivo, definida por una temática que conecta los sentidos.
Esta combinación es uno de los motivos que lo diferencia del resto de los clubes de vino, por lo cual inevitablemente debe ser el concepto a reflejar en la marca visual.
Fotos: Daiana Jaime